Durante el encuentro "Bien Común: Teoría y Práctica", organizado por la Academia Pontificia para la Vida, el Papa Francisco instó a la sociedad y a la Iglesia a abrirse a las voces femeninas y a las culturas de todo el mundo. En sus declaraciones, difundidas por la sala de prensa del Vaticano, el pontífice destacó la importancia de una perspectiva inclusiva y colaborativa para construir un futuro más equitativo y justo.

"Necesitamos, tanto en la sociedad como en la Iglesia, escuchar las voces femeninas; necesitamos saberes diferentes para cooperar en el desarrollo de una reflexión amplia y sabia del futuro de la humanidad", señaló Francisco.

El Papa también resaltó que "todas las culturas del mundo pueden ofrecer su contribución y expresar necesidades y recursos para pensar y generar un mundo más abierto" y enfatizó que la búsqueda del bien común y la justicia deben guiar los esfuerzos de protección de toda vida humana, especialmente la más vulnerable.

En un llamado a la fraternidad universal, el pontífice recordó la importancia de superar los intereses individuales para alcanzar la paz y la solidaridad global:

"En nuestro mundo, marcado por numerosos conflictos y contrastes que son resultado de la incapacidad de mirar más allá de los intereses particulares, es de gran importancia recordar el bien común, una de las piedras angulares de la doctrina social de la Iglesia", concluyó.

Este mensaje del Papa Francisco reafirma su compromiso de avanzar hacia una sociedad y una Iglesia más inclusivas, donde la diversidad de voces y culturas contribuya al fortalecimiento de los principios de justicia, solidaridad y fraternidad universal.